Los Concorde, un ejemplo de reinventarse en el rock

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Cuando la música logra conjuntar los elementos propicios, la sonoridad se proyecta a las alturas. Para llegar a ese nivel, Los Concorde han emprendido el vuelo, acarreando toda esa experiencia que les ha dejado el rock, pues eso Es lo que hay. De este nuevo material discográfico hablan con Crónica el bajista Poncho Toledo y el baterista Mauricio Clavería:

“Teníamos buenas rolas y sentíamos que para un segundo material, después del proceso del primer disco, estaba bien cederle a alguien ya el concepto general, de alguna manera el diseño en cuanto a sonido, por lo que le dimos carta abierta a Phil Vinall para que fungiera no sólo como un ingeniero de mezcla, sino como un post-productor, y entonces fue un experimento grato, estamos muy contentos”, afirma Poncho.

Es lo que hay tuvo un proceso que se remonta al año pasado cuando estuvo en promoción la rola “Eso sí dolió”, alcanzando los primeros lugares en la radio, al igual que se ha podido escuchar “Dramaddict”, ambas con mucha demanda en las descargas por internet; pero ahora este disco, tras presentarlo en diciembre de 2010, se encuentra a la venta ya por completo, luego de ser producido por el propio Toledo (ex La Lupita), así como por Clavería (ex La Ley) y Leonardo de Lozanne (vocalista del grupo y de Fobia).

“Los Concorde siempre hemos sido bastante autosuficientes en ese aspecto. Poncho ha sido como el productor principal y Leonardo y yo como co-productores, y la verdad es que ha funcionado esa fórmula; al mismo tiempo añadimos a Phil y lo hizo bien como productor asociado, aportó muchísimo, lo conocemos con los Zoé. Le gustó cómo venía el material y se compenetró con el trabajo”, comenta Mauricio.

La banda, integrada además por Jonáz (Plastilina Mosh), Tavo Limongi (ex Resorte) y Atto (and the Majestics), es considerada desde un colectivo de música, pasando por un taller artístico, hasta tener la función de promotores y empresarios, ya que han decidido, “después de muchos años de habernos vendido”, tener ahora el control, e incluso económicamente es redituable para ellos:

“Casualmente sí, por el hecho de tomarlo todo en nuestras manos, desde la imagen de la banda, de los discos, cómo los hacemos, a quién se los vendemos, todo hacemos nosotros. Hemos hecho alianzas con algunas personas, con oficinas de managment, y ahora vamos a trabajar con la compañía de Óscar Flores (…). Todo mundo lo ve como un taller, todos llegan, aportan y opinan, siempre con la consigna de no imponer, a menos que alguien esté seguro, pues también hay mucho respeto”, asegura Toledo.

Pero, más que nada, este proyecto es para seguirse divirtiendo, y en vivo derrochar toda la experiencia obtenida a lo largo del tiempo en el rock, dice Clavería: “Sí, funciona muy bien, fluye natural, no sabemos cuál es el sonido de Los Concorde pero no se parece a los demás grupos (a los cuales pertenecen o pertenecieron), las composiciones son completamente diferentes (…). Cuando empezamos a tocar juntos nos gustó mucho el sonido, que hiciéramos buenas canciones y que el grupo tuviera una característica, un sello”.

Igualmente, Mauricio celebra que las nuevas generaciones tomen en cuenta a Los Concorde, aunque lo consideren un grupo que apenas comienza. “Muchas veces dicen: ‘¡guau!, está buena esta propuesta nueva’, y los papás de más de 30 años los corrigen: ‘no, era el baterista de La Ley’; pero bueno, esa es la virtud de renovarse musical y personalmente.

Para su próxima presentación en el Maximus Quintín, el 30 de junio, los músicos aseguran que es impredecible, que todo puede pasar… “Nuestra experiencia nos puede llevar a todo, a improvisar, a cambiar sobre la marcha, en fin, hay mucho colmillo, mucho punch en el escenario, nosotros sabemos llevar a la gente”, finaliza Poncho.

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