El éxito de Adele es indiscutible. Es la británica menor de 30 años que más dinero gana, sus discos baten récords de ventas y las entradas para sus conciertos se agotan en segundos. Pero la fama también pasa factura: la obliga a estar alejada de su hijo Angelo, de dos años.

La cantante parece que ha decidido ponerle remedio. Según publica The Sun, Adele va a tomarse un descanso de 10 años cuando termine su gira mundial en noviembre, aunque ni ella ni su representante lo han confirmado oficialmente.

"Angelo es su prioridad. Hasta ahora lo ha llevado a todas partes de gira, pero teniendo en cuenta que el pequeño empezará el colegio el próximo año, no va a poder acompañarla más", cuenta una fuente próxima a The Sun. La cantante parece que no está dispuesta a perderse ni un solo momento de la infancia de su hijo y prefiere dejarlo todo y estar con él. Al menos, en la próxima década.

Adele ya se tomó un descanso después de dar a luz, en 2012. Tardó tres años en lanzar nuevo disco, 25, que se convirtió en el disco más vendido en solo una semana. Poco después, firmó con Sony el contrato más millonario de la industria discográfica: 116 millones de euros